Los senos que son excesivamente grandes pueden ser un verdadero problema físico para las mujeres que los tienen. A pesar de lo que la gente pueda pensar, cuanto más grande, mejor no siempre es cierto cuando se trata del tamaño y volumen de los senos. Las mujeres con senos demasiado grandes para su anatomía se enfrentan a menudo a problemas funcionales y molestias como dificultades para encontrar ropa y lencería adecuadas, dolor constante en el cuello, los hombros y la espalda, dificultades para respirar o descansar sobre el abdomen, y por último, pero no por ello menos importante, dificultades o la imposibilidad de realizar ejercicios físicos y deportes.
Imagínese tener senos que pesen más de 1 kg cada uno o senos que pesen 3 kg cada uno. ¿Cree que puede participar en actividades físicas? Además, la dificultad para respirar e incluso el dolor pueden estar asociados con la práctica de deportes o ejercicios físicos. Para las mujeres con senos tan grandes, incluso algo tan simple como ponerse el cinturón de seguridad puede ser una lucha y una gran incomodidad.
En este artículo discutiremos los senos demasiado grandes y la obesidad, cómo están conectados y qué se puede hacer para mejorar la condición de la paciente.
La maldición de tener senos demasiado grandes
Mientras que muchas mujeres recurren a la cirugía plástica para agrandar y aumentar el volumen de sus senos, hay mujeres que sienten que el tamaño demasiado grande de sus senos es realmente una maldición. Hay muchas molestias e incluso condiciones de salud asociadas con tener senos que son excesivamente grandes para la anatomía de una persona. Esta desproporción del volumen de los senos respecto a la silueta es consecuencia de la hipertrofia de la glándula mamaria, a menudo asociada a una causa congénita u hormonal. El exceso de tejido mamario se asocia a menudo con un exceso de grasa y ptosis en los senos. Las asimetrías también pueden estar presentes.
Las mujeres con senos excesivamente grandes a menudo se enfrentan a condiciones médicas. Por ejemplo, debido a la falta de flujo de aire al pliegue inframamario y a la transpiración constante, pueden ocurrir condiciones dermatológicas e incluso infecciones en el área. Las condiciones no sólo son desagradables, sino que pueden ser muy difíciles, si no imposibles de tratar, ya que la recomendación es a menudo mantener el área seca y limpia en todo momento. Esto no es posible para una mujer con senos demasiado grandes.
El dolor de espalda, cuello y hombros que puede llegar a ser crónico en mujeres con senos grandes es otro problema que determina la necesidad de cirugía para mejorar la calidad de vida de la paciente. Debido al excesivo volumen de los senos y a la presión que ejercen sobre la columna vertebral, se puede desarrollar una posición corporal anormal que sería difícil, si no imposible, de corregir más adelante en la vida. Esta es la razón por la que la mayoría de los cirujanos plásticos recomendarían someterse a una cirugía de reducción de senos lo antes posible para las pacientes jóvenes que padecen de hipertrofia grave en los senos.
Encontrar ropa y lencería que le quede bien a los senos es otra lucha diaria. A menudo, estas mujeres elegirán usar ropa que sea de muchas tallas más grande que su tamaño normal o ropa que sea muy elástica para acomodar los senos. Esto a menudo no es halagador ni profesional y puede ser un problema para las mujeres activas en el campo profesional.
Hay muchos otros problemas y luchas asociados con los senos grandes. Sin embargo, uno de los más importantes está probablemente relacionado con el dolor y la dificultad para realizar ejercicios físicos y la gran cantidad de complicaciones que conlleva.
Senos demasiado grandes y la obesidad
Hoy en día los expertos advierten sobre una tendencia global hacia el sedentarismo, y países de todo el mundo declaran un aumento en la tasa de obesidad. Más que un problema estético, la obesidad es una condición de salud que, si no se trata, puede llevar a complicaciones graves e incluso a la muerte del paciente. La obesidad puede ser causada por muchas cosas, pero en general, ganamos peso como resultado de comer más alimentos de los que nuestro cuerpo necesita para funcionar. Las personas activas necesitarán más calorías que las personas que llevan una vida sedentaria. Esta es la razón por la que también existe una conexión entre el sedentarismo y la obesidad. Cuanto más pesa la persona, más difícil le resultará estar activo y hacer ejercicio con regularidad. La misma regla se aplica cuando se trata del tamaño demasiado grande de los senos.
Antes que nada, debemos mencionar que las personas obesas a menudo experimentan desequilibrios hormonales que pueden llevar al desarrollo anormal o al aumento del tejido glandular. Para las personas obesas, los senos pueden ser proporcionales al resto del cuerpo y pueden afectarse de la misma manera por la acumulación de grasa, o pueden ser aún más grandes debido al excesivo desarrollo del tejido glandular causado por las hormonas. Así que la obesidad y los senos demasiado grandes están relacionados en más de una forma.
Lo que queremos enfocar en este artículo es que las pacientes que están sufriendo debido al tamaño demasiado grande de los senos pueden, con el tiempo, volverse obesas o tener sobrepeso severo porque no pueden vivir una vida activa.
En términos generales, no hay excusa para no hacer ejercicio regularmente o no participar en deportes. Mantenerse activo es importante para mantener un cuerpo en forma que también sea saludable y feliz. Esta es la razón por la cual las personas que nunca se han ejercitado en su vida recogen rutinas de ejercicios físicos como ir al gimnasio, trotar, nadar o andar en bicicleta muy tarde en su vida. No hay mejor momento para ponerse en marcha que el actual, y todos los expertos lo atestiguarán.
Pero para las mujeres con senos demasiado grandes, realizar ejercicios físicos puede ser una verdadera lucha, sin mencionar que incluso pueden experimentar dolor y dificultades para respirar durante o después de los deportes. Tener senos demasiado grandes significa que hay un nivel más intenso de presión en la columna vertebral y también que sus piernas necesitan soportar más peso del necesario para su anatomía. La actividad física puede significar dolor en los senos debido a los movimientos, dificultades para respirar y también dolor en el cuello, la espalda y los hombros. Esta es la razón por la cual muchas mujeres con senos grandes renuncian completamente a la idea de hacer ejercicio incluso muy temprano en sus vidas. No hacer ejercicio conduce a un núcleo débil (falta de tono en los músculos de la pared abdominal) que conduce a una mala postura, y así sucesivamente.
Además, la falta de ejercicio puede llevar a una acumulación excesiva de peso e incluso a la obesidad. Cuando el aumento de peso comienza a ocurrir, realizar actividades físicamente exigentes puede ser aún más difícil o incómodo, por lo tanto, el paciente las evitará aún más. Como puede ver, se trata de un círculo vicioso que en muchos casos sólo puede detenerse reduciendo el tamaño y el volumen de los senos con la ayuda de la cirugía plástica.
Reducción de senos para reducir el volumen de los senos
La única manera de corregir el tamaño y volumen excesivamente grande de los senos es a través de la reducción de senos, que es un procedimiento de la cirugía plástica que eliminará el exceso de piel, grasa y tejido glandular al mismo tiempo que eleva los senos y los hace más simétricos.
El proceso de reducción de sus senos comienza con una consulta preoperatoria con su cirujano plástico. El cirujano plástico examinará su anatomía y la estructura de los senos y diseñará un plan de tratamiento adecuado que también tendrá en cuenta los resultados que desea lograr. También se le pedirá que se reúna con el anestesiólogo antes de someterse a la reducción de senos y que se le realicen algunas pruebas. Se recomienda una mamografía para las mujeres mayores de 40 años, mientras que la ecografía de senos puede ser suficiente para las pacientes más jóvenes.
Dependiendo de la naturaleza de la hipertrofia mamaria, la operación dura hasta dos horas o más en casos complejos. Al final del procedimiento, se coloca un vendaje en forma de sostén en el seno. La hospitalización puede ser de unas pocas horas y hasta 24 horas, dependiendo del tipo de procedimiento y del desarrollo postoperatorio del paciente. Las primeras semanas después de la cirugía de reducción de senos se asocian con ciertos efectos secundarios que son normales después de un procedimiento tan complejo.
Conclusión
Hay una conexión en múltiples niveles entre los senos demasiado grandes y la obesidad. En primer lugar, la obesidad puede desencadenar un crecimiento excesivo de los senos debido a los desequilibrios hormonales. Al mismo tiempo, los senos demasiado grandes en pacientes de peso normal pueden ser la causa de problemas de peso e incluso de obesidad, ya que dificultan o imposibilitan los ejercicios físicos para la paciente.