Dada la creciente popularidad de los procedimientos de cirugía plástica con curvas, es importante que las pacientes sean conscientes de los riesgos asociados con la cirugía. Debido a que puedes conseguirte con situaciones que son una amenaza para la vida si llegas a la cirugía sin preparación.
Durante la consulta inicial con un cirujano plástico, debes estar preparada para discutir los riesgos del procedimiento y contrastarlos con los beneficios potenciales. En consecuencia, estos son los riesgos comunes asociados con los procedimientos con curvas:
1. Sangrado excesivo
2. Seroma y hematoma
3. Infecciones
4. Inflamación y contusiones excesivos
5. Cicatrices desagradables
6. Coagulación de la sangre
Los riesgos son mayores para las pacientes que tienen los siguientes problemas de salud:
• Un sistema inmunológico más débil
• Una mala circulación sanguínea
• Si sufres de enfermedades renales, pulmonares, cardíacas o hepáticas.
• Si tienes un historial de problemas de coagulación sanguínea
• Si sufres de diabetes, enfermedades cardíacas, problemas respiratorios o hipertensión
Los riesgos raros asociados con la cirugía con curvas se incluyen en la siguiente lista:
• Reacción adversa a la anestesia
• Cambio o pérdida de sensibilidad en la piel (temporal o permanente)
• Aparición de celulitis o arrugas en la piel
• Complicaciones cardíacas y respiratorias
• Dolor severo y prolongado
Con el fin de asegurar que la cirugía tenga los mínimos riesgos para ti, utilizo un criterio muy estricto para determinar la candidatura de las pacientes para el procedimiento con curvas. Idealmente, debes estar en un muy buen estado de salud física y mental con el fin de ser una buena candidata para la cirugía.
Espero que mis pacientes estén al día con la información de salud crítica porque retener cualquier información importante puede ser fatal para la paciente. Si estás tomando ciertos medicamentos, tales como, medicamentos anticoagulantes, medicamentos antiinflamatorios o suplementos naturales, debes informar a tu cirujano antes de someterte a cualquier procedimiento.
Si fumas, debes discutirlo con tu cirujano durante la consulta inicial. Se te requerirá dejar de fumar por lo menos de 2 a 3 semanas antes de la cirugía y abstenerte de fumar por lo menos un mes después de la cirugía.
Recuerda, antes de someterte a la cirugía, es importante hacer un análisis riesgo / beneficio. Si las ventajas del procedimiento son más altas que los riesgos, solamente entonces debes realizarte la cirugía.