Una manera de mejorar la apariencia de los senos es someterse a una cirugía de aumento de senos. Este procedimiento implica la inserción de un implante que se llena con silicona o solución salina. El implante hará que los senos luzcan más grandes, más simétricos y mejor contorneados. Al mejorar el aspecto de los senos, una mujer puede sentirse más segura de su cuerpo.
Aunque la cirugía de implantes de seno puede ayudar a que luzcan mejor, también hay complicaciones y riesgos que van con ella. Uno de ellos es la ruptura de los implantes de seno. Cuando esto sucede, hay una necesidad de retirar inmediatamente los implantes rotos y reemplazarlos.
Los implantes de seno se fabrican para ser durables que es la razón por la cual ellos duran generalmente por un tiempo muy largo. La mayoría de las mujeres tienen sus implantes de senos durante décadas antes de que se rompan debido a la contractura capsular. La contractura capsular ocurre cuando el cuerpo de la paciente reacciona negativamente a los implantes formando cápsulas endurecidas. El cuerpo suele formarlas alrededor de los implantes como una forma de protegerse contra cuerpos extraños. Cuando se endurecen y calcifican, se conoce como contractura capsular. Esto resulta en que algunos de los músculos se estiran y también puede causar que se apriete el área alrededor del implante hasta que este ya no puede soportar la presión, por lo que se rompe o fuga.
A algunas pacientes se les hace fácil darse cuenta cuando sus senos tienen ruptura debido a que pueden ver claramente que hay una deformación en sus senos. Otras no lo notan, ya que el cambio en la apariencia de sus senos no es visible. Para aquellas personas que tienen implantes rellenos de solución salina que se rompen, la solución salina será simplemente reabsorbida por el cuerpo. Por otro lado, cuando la silicona se fuga de los implantes debe ser manualmente removida a través de la cirugía y esto puede ser muy difícil.
La remoción de un implante roto se puede hacer pasando por otra cirugía. El cirujano saca cuidadosamente el implante junto con la cápsula para evitar que la silicona que se filtró llegue a otros tejidos. En algunos casos, una cápsula entera e intacta se puede remover, pero hay otros casos en los que no se puede hacer. Después de retirar la cápsula, la paciente puede optar por reemplazar el implante y otro bolsillo se puede hacer para el nuevo implante. También es posible que las pacientes decidan no reemplazar los implantes y simplemente retirarlos.
La remoción de un implante de seno roto se realiza a través de otra cirugía. Las pacientes deben elegir cuidadosamente al cirujano con el que van a trabajar, ya que es más fácil colocar los implantes que removerlos, especialmente cuando ya se han roto. Los cirujanos tienen la tarea de eliminar la mayor cantidad posible de silicona para evitar que migre a otras áreas del cuerpo. También depende de sus manos habilidosas crear otro bolsillo en el que los nuevos implantes de seno se posicionen y permanezcan por un período de tiempo más largo.