La reducción de senos es un procedimiento quirúrgico que removerá los tejidos mamarios, grasos y de la piel que están en exceso para alcanzar una dimensión más adecuada de los senos y para aliviar las múltiples molestias asociadas con tener senos demasiado grandes.
En muchos casos, los senos grandes pueden causar problemas físicos o emocionales. La autoestima de la paciente puede sufrir, así como el desarrollo general de la mujer. Por ejemplo, las adolescentes con senos demasiado grandes pueden desarrollar condiciones de la columna vertebral y una postura corporal anormal que puede afectarlas por el resto de sus vidas si no se reduce el volumen de los senos. Además, el volumen y el peso del exceso de tejido mamario pueden afectar la capacidad de la paciente para llevar una vida normal y activa. La incomodidad emocional asociada con los senos demasiado grandes puede ser un problema tan importante como la incomodidad física para algunas mujeres.
La cirugía de reducción de senos sólo debe ser realizada por un cirujano plástico experimentado y certificado por la junta en un centro médico acreditado para reducir los riesgos asociados con el procedimiento. En la gran mayoría de los casos, la hospitalización después de la cirugía de reducción de senos no dura más de 12 a 24 horas, dependiendo de la cantidad de tejido a extirpar y de la cicatrización postoperatoria de la paciente. Después de la reducción de senos, se vendan las incisiones quirúrgicas y se coloca un sostén postoperatorio especial para reducir el edema postoperatorio y ofrecer soporte para los senos después de la cirugía.
Muchas pacientes desean saber qué pueden esperar durante los dos primeros días después de la cirugía de reducción de senos, y éste es un tema importante que deben discutir con el cirujano plástico durante la consulta preoperatoria.
En términos generales, la fase inicial del proceso de recuperación puede incluir inflamación, edema y molestias en las incisiones y los senos. La molestia y el dolor son efectos secundarios comunes que pueden ocurrir después de cualquier tipo de intervención quirúrgica y pueden aliviarse fácilmente con medicamentos prescritos por el cirujano plástico.
Además de la medicación para el dolor, al paciente también se le prescribirán antibióticos que tienen el propósito de prevenir una posible infección que puede ocurrir en los días posteriores al procedimiento quirúrgico.
Los primeros días después de la cirugía de reducción de senos, se aconseja a la paciente que descanse lo suficiente, pero que no mienta ni presione los senos. Esto significa que en la mayoría de los casos, los primeros días después de la cirugía de reducción de senos se pasan en la cama o en el sofá. Cada pocas horas, el paciente debe dar pequeños paseos por la habitación o la casa para evitar la formación de coágulos de sangre. Es importante durante este tiempo beber mucha agua para no deshidratarse y volver a comer gradualmente.
El dolor puede ser más intenso durante los dos primeros días después de la operación. Este es un efecto secundario normal del procedimiento. Sin embargo, si el dolor es demasiado intenso o está asociado con otros síntomas de infección, el paciente debe contactar al cirujano plástico inmediatamente.