La cirugía de implante de senos es un procedimiento de aumento de senos que aumenta el tamaño y mejora la forma del seno. Utiliza implantes de gel de silicona para alterar los senos. El procedimiento quirúrgico consiste en realizar una incisión, insertar los implantes en el hueco creado y luego suturar la incisión. Como se trata de una cirugía mayor, se espera dolor debido al trauma causado al cuerpo durante el procedimiento. Dicho esto, usted no necesita preocuparse por experimentar dolor durante la cirugía de implante de senos porque se le administrará anestesia, pero eventualmente desaparecerá durante la recuperación. Por consiguiente, los cirujanos les prescriben analgésicos a sus pacientes, para que puedan controlar el dolor mientras se recuperan.
Es normal que sus senos le duelan después de la cirugía debido a los implantes. Usted sentirá un poco de dolor y entumecimiento porque la piel se estira para acomodar los implantes de senos. Si usted tiene los implantes colocados debajo del músculo o sobre ellos, la piel aún así necesitará estirarse. Afortunadamente, el dolor generalmente desaparece en un par de días. En cuanto al entumecimiento, esto es causado por el estiramiento de los nervios junto con el estiramiento de la piel. La cirugía puede causar daño a los nervios, por lo cual es que hay entumecimiento. Sin embargo, el entumecimiento es sólo temporal y eventualmente volverá después de unas semanas cuando los nervios se hayan regenerado y curado.
Aparte de la piel, los músculos también se pueden estirar especialmente si los implantes están ubicados debajo de los músculos. Esto puede causar espasmos musculares o calambres, lo cual también pueden ser doloroso. Para mitigar el dolor y el malestar, los cirujanos pueden prescribirle un relajante muscular para que lo tome durante el primer par de días.
Hay casos raros donde los pacientes desarrollan ciertas complicaciones que llevan a más dolor. Por ejemplo, desarrollar una infección es una complicación que causa que los pacientes sientan dolor en sus senos, la cual también está acompañada por enrojecimiento e hinchazón de los senos. Si los implantes se infectan, debe ser removidos inmediatamente. Esto es para evitar que la infección empeore y se vuelva perjudicial para su salud. Además, la infección se trata con antibióticos que los pacientes pueden tomar por vía oral o por vía intravenosa. Una vez que el paciente se haya curado de la infección, los pacientes podrán reprogramar otra cirugía para reemplazar los implantes.
Aparte de eso, también puede haber dolor en sus senos después de la cirugía debido a un seroma que se haya formado. La formación de un seroma es una posibilidad, pero por lo general desaparece por sí sola, especialmente si sólo se ha acumulado una pequeña cantidad de líquido. Por otro lado, los seromas más grandes que causan dolor severo tendrán que ser drenados para que los pacientes estén más cómodos y para prevenir una infección.
También hay casos en los que los pacientes pueden sentir dolor agudo después de años de tener sus implantes de senos. Esto puede aparecer después de hacer su rutina de ejercicio u otras actividades extenuantes. La mayoría de las veces, esto se debe a un músculo estirado o una cápsula de seno rota. Este tipo de dolor mejorará con el tiempo y puede que no haya necesidad de hacer nada.
En general, usted puede esperar sentir un cierto grado de dolor ya que es un procedimiento quirúrgico. Sin embargo, normalmente desaparece en pocos días, siempre y cuando no se desarrollen complicaciones.