La liposucción es un procedimiento de cirugía plástica en el cual la gasa es extraída de ciertas áreas del cuerpo del paciente con la ayuda de una cánula (éstas pueden venir en diferentes tamaños) que es introducida en el tejido adiposo y conectada a un artefacto de succión. Los métodos de liposucción más comunes son la liposucción clásica y la liposucción asistida por potencia. La liposucción es una opción para hombres y mujeres de todas las edades que necesitan que la grasa sea sacada de áreas particulares del cuerpo para lograr una silueta más balanceada y contornos corporales mejorados.
Es importante mencionar que la liposucción sólo puede extraer cierta cantidad de grasa, dependiendo del peso del paciente y forma del cuerpo. Sin embargo, el objetivo que queremos lograr con la ayuda de liposucción no es pérdida de peso, sino una línea de cuerpo más estética. No es necesario mencionar que las recomendaciones del doctor después del procedimiento consisten en mantener un estilo de vida saludable con una dieta apropiada y ejercicio en el gimnasio en forma regular.
El procedimiento de liposucción no es doloroso en sí mismo porque se usa anestesia local, pero dolor después del procedimiento depende del área, la resistencia del paciente al dolor, la cantidad de grasa extraída, y el método usado.
Las complicaciones del procedimiento de liposucción son las mismas que para cualquier otra intervención quirúrgica: dolor, sangrado, edema, moretones. Aparte de estos, dureza y abultamiento pueden ocurrir después de liposucción. Mientras que algo de dureza y ondas de contorno pueden ocurrir en cualquier caso, al menos en las primeras semanas después del procedimiento el doctor usará su experiencia y habilidad para mantenerlos al mínimo. Pero a veces simplemente no se pueden evitar, sin importar qué tan hábil es el cirujano; cada cuerpo es diferente y reaccione en forma particular al procedimiento. Es esencial que el doctor discuta estas complicaciones con el paciente para poner expectativas realistas y explicar cómo lidiar con los efectos secundarios.
Usar la faja que doctor indica es probablemente la recomendación más crucial para después del procedimiento, ya que esta vestimenta elástica ayudará a evitar complicaciones después de la cirugía y a reducir inflamación. Masaje linfático puede ayudar a reducir la dureza y abultamiento, mientras se realice con gentileza y cuidado. Una mano profesional hará toda la diferencia en ver resultados prontos, pero también puedes hacer los masajes tú misma. Inyecciones de Kenalog también pueden usarse para lidiar con la dureza, pero sólo son necesarias en algunos casos si el doctor las recomienda.
Mientras que en general podrás ver la forma final de tu cuerpo en un par de meses, puede tardar hasta nueve meses deshacerse de la dureza y bultos en algunas áreas. No hay nada de lo que preocuparse; es simplemente el proceso natural de recuperación después del procedimiento de liposucción. Para asegurarte de que tu recuperación tome el menor tiempo posible, sigue las recomendaciones de tu doctor al pie de la letra.