Al considerar la cirugía plástica para mejorar la apariencia de los senos y aumentar su volumen, es importante saber que la mayoría de los cirujanos plásticos te informará acerca de dos procedimientos disponibles actualmente: la cirugía de implantes de seno y la transferencia de grasa.
Muchos de los detalles de la cirugía de implantes de seno son bien conocidos hoy en día, ya que el procedimiento se ha realizado con éxito durante más de medio siglo y la información está disponible en todas partes en línea. La transferencia de grasa a los senos es un procedimiento más moderno que se desarrolló con el propósito de lograr un aumento con menos complicaciones y riesgos potenciales que la cirugía de implantes de seno. La transferencia de grasa también se realiza en los glúteos y las caderas y en otras áreas del cuerpo que podrían usar un más volumen, como por ejemplo, la cara.
La transferencia de grasa tiene múltiples beneficios, y probablemente el más importante es que proporciona buenos resultados en términos de la remodelación del cuerpo y del perfil de la paciente, y no solo del área objetivo de la transferencia. La transferencia de grasa solo puede realizarse después de la liposucción. La liposucción se realiza en áreas del cuerpo con un exceso de tejido adiposo. De esta forma, el cirujano plástico recogerá la grasa que luego será procesada y reinyectada en los senos. Esto significa que para ser elegible para este procedimiento, la paciente debe tener áreas con exceso de grasa en el cuerpo.
La transferencia de grasa a los senos se considera el método «natural» para aumentar el tamaño de los senos. Se asocia con pocas complicaciones potenciales y los riesgos son menores. Sin embargo, las pacientes interesadas en someterse a la transferencia de grasa deben ser conscientes del hecho de que este procedimiento no puede ofrecerles el mismo tipo de aumento que los implantes.
La cirugía de implantes de seno puede aumentar el tamaño de los senos con exactamente el volumen de los implantes utilizados. Este volumen de los senos es fácilmente sostenible en el tiempo, ya que los implantes de seno no se ven afectados por factores externos o internos. Cuando se trata de los resultados logrados con la transferencia de grasa, la cantidad de grasa que se puede inyectar durante una sesión de transferencia de grasa es limitada. Además, no toda la grasa inyectada durante la cirugía sobrevivirá y desarrollará una nueva red de sangre. Hasta el 30% de la grasa inyectada puede ser reabsorbida por el cuerpo en los primeros dos meses después del procedimiento. Las fluctuaciones de peso posteriores también pueden afectar los resultados. Esto significa que si la paciente pierde peso, es probable que el volumen de los senos también se vea afectado.
En algunos casos, la recomendación será someterse a una cirugía de implantes de seno en combinación con la transferencia de grasa para lograr resultados estéticos superiores.